Reactivar mina sin Asamblea: ¿una solución o un nuevo conflicto?
El gobierno de Panamá, encabezado por el presidente José Raúl Mulino, está explorando formas de reabrir la mina de cobre Cobre Panamá sin necesidad de aprobación de la Asamblea Nacional. Esta mina, una de las más grandes del país, fue cerrada en 2023 tras protestas y una decisión judicial que declaró ilegal su contrato. Ahora, el presidente busca alternativas que permitan reactivar la mina, destacando que pertenece a los panameños y que su reapertura podría generar empleos y beneficios económicos. Sin embargo, la oposición de grupos ambientales y comunidades locales persiste, preocupados por los posibles daños ecológicos y sociales.
¿Qué está pasando con la mina?
La mina Cobre Panamá fue cerrada en noviembre de 2023. La Corte Suprema de Justicia declaró inconstitucional el contrato que permitía su operación. Esto ocurrió después de protestas masivas por preocupaciones ambientales y sociales.
El presidente Mulino ha dicho que no buscará un nuevo contrato legal para reabrir la mina. En cambio, su gobierno está considerando otras opciones que no requieran la aprobación de la Asamblea. Una de las ideas es establecer una asociación que deje claro que la mina pertenece a Panamá y a los panameños.
¿Por qué es importante la mina?
Antes de su cierre, la mina representaba casi el 5% del Producto Interno Bruto (PIB) de Panamá. Generaba miles de empleos directos e indirectos. Además, contribuía significativamente a la economía nacional.
El cierre de la mina afectó a muchas personas y empresas que dependían de ella. Algunos proveedores han tenido que despedir personal o cerrar sus negocios.
¿Qué dicen los opositores a la mina?
Grupos ambientales, comunidades indígenas y residentes locales se oponen a la reapertura de la mina. Argumentan que ha causado daños al medio ambiente y que las promesas de desarrollo no se han cumplido. También temen por la salud de las personas y la contaminación de los recursos naturales.
Estos grupos han organizado protestas y bloqueos para expresar su rechazo. Algunos líderes comunitarios han señalado que, a pesar de la presencia de la mina, sus comunidades carecen de servicios básicos como electricidad, agua potable y centros de salud.
¿Qué sigue con la mina?
El gobierno está realizando una auditoría de la mina para evaluar sus instalaciones y riesgos ambientales. También se están considerando diferentes opciones para su reapertura sin necesidad de un nuevo contrato legal.
La empresa canadiense First Quantum, que opera la mina, ha suspendido su demanda de arbitraje contra Panamá para facilitar las conversaciones. Sin embargo, otros casos legales aún están en curso.
Tema complejo
La reapertura de la mina Cobre Panamá es un tema complejo que enfrenta intereses económicos y preocupaciones ambientales. El gobierno busca soluciones que beneficien al país sin repetir errores del pasado. Es esencial que cualquier decisión considere el bienestar de las comunidades locales y la protección del medio ambiente.
La situación actual representa una oportunidad para que Panamá demuestre que es posible desarrollar proyectos económicos de manera responsable y sostenible.