Mireya Moscoso ha anunciado que a inicios del próximo año será cuando se lance a la recuperación del partido, para entregar su presidencia a un verdadero Arnulfista, tal como lo es Alberto Vallarino
Tras la finalización de las elecciones primarias complementarias del partido Panameñista se llevó a cabo en Punta Mala, una reunión entre la presidenta vitalicia del colectivo y exmandataria de la República,
Mireya Moscoso y Alberto Vallarino para analizar los resultados de la convocatoria política. La reunión fue extensa y finalizó con un brindis tras alcanzarse algunos acuerdos. Panameñismo sin Mireya A Mireya Moscoso le tocó vivir en el exilio, junto a su desaparecido esposo, el tres veces presidente de la República, Arnulfo Arias Madrid y pudo ver con tristeza como eran despojados hasta del nombre y los símbolos de la organización. Moscoso ha dejado correr al varelismo, que ha desconocido la importancia de varios de los antiguos arnulfistas y de ella en particular, reconocida como uno de los máximos símbolos del partido.
En su intención de anular a quienes sacrificaron tanto por el panameñismo, los varelistas han empezado a utilizar hasta colores diferentes a los tradicionales, en particular el blanco, una tonalidad neutra que no se relaciona con el fervor de los estandartes y banderas de tan combativa agrupación política.
Asimismo, Juan Carlos Varela y sus seguidores han hecho desaparecer de sus oficinas las fotografías del máximo líder y fundador del panameñismo, Arnulfo Arias Madrid.
Analizaron la situación política y partidaria
En la mencionada reunión entre Moscoso y Vallarino, se llegó a la conclusión de que Varela no tiene ninguna opción de acceder al solio presidencial, porque no ha sido capaz de llegar a las bases del colectivo, situación que ha provocado que muchos de los convencionales se hayan marchado a los partidos oficialistas Cambio Democrático y Molirena. También se pudo determinar que los candidatos vencedores en las recientes primarias del partido, buscarán los votos para sus respectivas propuestas más no así para el candidato a la presidencia.
Algo importante que debe destacarse es que Juan Carlos Varela se ha rodeado de muchos de los allegados a su empresa licorera que no se identifican con la doctrina panameñista, relegando a los históricos y a los verdaderos militantes.
Según se nos ha revelado, tanto Moscoso como Vallarino, coincidieron en que Varela va hacia su muerte política y ellos no seguirán ese camino para no sufrir la misma suerte.
Vallarino tiene gran peso
El exministro Alberto Vallarino es una figura con mucha fuerza dentro del panameñismo debido al apoyo financiero que otorga al partido, así como a muchos de sus miembros. Vallarino, según fuentes a lo interno del panameñismo, ha mantenido sus relaciones con el gobierno y favorece la candidatura de José Domingo Arias a la presidencia.
Él ha concordado con Moscoso en que es de suma importancia recuperar el partido porque con la conducción de Varela va camino al desastre y a su posible desaparición del escenario político nacional.
Ambos coinciden en que la alianza con el Partido Popular allanará el camino hacia el abismo político del panameñismo, ya que Varela emprendió anteriormente otra aventura con los “verdes” a los que logró debilitar y llevar al borde de la extinción.
La decisión tomada
Varela solo podría aliarse al PRD para intentar sobrevivir, lo que adelantaría su muerte política y facilitaría la alianza oficialista con los integrantes del partido Panameñista, hartos ya del desastre de su dirigencia. Mientras tanto, Moscoso ha anunciado que a inicios del próximo año será cuando se lance a la recuperación del partido, para entregar su presidencia a un verdadero arnulfista, tal como lo es Albero Vallarino.
La fotografía tomada en Punta Mala no puede ser más elocuente. En ese idílico lugar se materializó el Pacto Moscoso-Vallarino, establecido con el propósito de recuperar el partido panameñista.
