El director de la Caja de Seguro Social, Alfredo Martiz, culminó, este miércoles, el proceso de rendición de cuentas, luego de dos días de comparecencia en la Asamblea Nacional, donde sustentó algunas medidas de acción dirigidas a garantizar la permanencia de este sistema de seguridad pública. Además, se mantuvo en su posición de rechazar cualquier idea de privatización.
De acuerdo con el médico, con más de 35 años de experiencia en el campo, hay un pleno convencimiento de gestionar un sistema integral público de salud (MINSA, Seguro Social), pero no cree en la privatización.
Señaló que es un tema que se discute no sólo en Panamá sino en el planeta, la integración de todos los sistemas de salud. Para el funcionario, ya es hora de sentarse a debatir la coordinación entre las entidades de seguridad social.
Este sistema bicéfalo, añadió, origina una baja satisfacción en la atención y adicional un costo, por lo que representa el traslado de un paciente del interior hacia la capital.
En el pleno, el funcionario que tomó rienda de la administración en mayo del 2017, tras la renuncia de Estivenson Girón, aseguró que el principal temor al llegar a la institución fue el estado financiero de la CSS. Expresó que estaba preocupado por las finanzas de la entidad, lo que pone en riesgo los programas y en general la vida funcional del Seguro.
Martiz destacó que, aunque se fundamentan en estudios, cálculos y las corridas, en base al crecimiento del PIB, reconoció que el incremento de la población ha generado una extensión en la expectativa con relación al tema de Invalidez, Vejez y Muerte.
