«Durante mi gobierno La Zona Libre de Colón no será afectada con la imposición de nuevos impuestos y mantendremos su condición de zona franca, a fin de garantizar la competitividad en la economía de la región y el mundo», señaló Juan Carlos Navarro, precandidato presidencial del PRD.
Navarro hizo estos señalamientos durante una conferencia de prensa en la que anunció que una vez asuma la presidencia de la República pondrá en práctica medidas que simplifiquen los trámites burocráticos que puedan afectar el manejo fluido del comercio en la zona franca.
El precandidato presidencial propone la planificación y el ordenamiento en la Zona franca, medida que incluye el suministro permanente de agua potable, un programa de ornato y aseo, el ordenamiento de los espacios públicos y estacionamientos, así como estrictas medidas de seguridad. También, un nuevo cuartel de bomberos que responda de forma inmediata a las emergencias y evitar así que se susciten siniestros como los registrados en años recientes.
Además, propone que la Junta Asesora del Presidente para Asuntos de Colón (JAPAC), y que los fondos que la Zona Libre invierte en obras sociales, sean trasladados a los gobiernos locales como parte de un proceso de descentralización municipal, a fin de que sean manejados por los alcaldes y representantes de cada municipio de Colón, mediante consulta pública con la comunidad.
El precandidato presidencial del PRD advirtió que los intentos de gravar con impuestos a la Zona Libre, generó resultados negativos hace algunos años, tal como ocurrió en 1995 cuando importantes empresas transnacionales anunciaron su cierre tras la imposición de la medida.
«La empresas usuarias reaccionaron de inmediato con el cierre de aproximadamente 35 empresas con su consecuente reducción en el empleo por el orden de 1,269 puestos de trabajo perdidos», precisó Navarro.
Indicó que, en cambio, cuando se comunicó a los empresarios que se desistía de dicha propuesta impositiva, el número de empresas en la zona franca aumentó al año siguiente a 45 adicionales y el total de empleo se incrementó en 1,487 nuevas plazas, «lo que demuestra la naturaleza de hacer negocios en la zona libre de impuesto».
Según análisis realizados, se estima que para el 2000 las empresas pagaban de manera directa cerca de B/.200.00 millones anuales en concepto de tasas y servicios a la administración de la zona franca, aporte a la Caja de Seguro Social, Servicios Básicos, Salarios pagados, impuesto sobre la renta por exportaciones al territorio de la República de Panamá, Impuesto sobre la Renta de los trabajadores, FECI e Impuesto de importación pagados por las empresas nacionales, entre otras.
Navarro recalcó que la Zona Libre de Colón, que registró en diciembre de 2007 una actividad comercial total por el orden de los B/.16,156.7 millones, contribuye de manera directa y efectiva al desarrollo de la industria turística de Panamá, a la que aportó más 149,970 turistas al cierre de ese año.
«Estos visitantes, que son también inversionistas o comerciantes, invierten en hoteles, restaurantes, sitios de diversión, compran en los mall de la ciudad terminales de Panamá y Colón, y muchos de ellos se desplazan hacia David y el interior, generando riquezas al país», acotó.
