Un espectáculo para toda Centroamérica y de talla internacional vivieron miles de personas -entre panameños y extranjeros- que abarrotaron el nuevo estadio Rommel Fernández Gutiérrez para presenciar el inicio de la fiesta deportiva más importante en los últimos 40 años para Panamá: los IX Juegos Deportivos Centroamericanos.
El presidente de la República, Ricardo Martinelli declaró inaugurados oficialmente este encuentro deportivo de naciones y en su discurso habló de la hermandad regional, deseando el mejor de los éxitos a todas las delegaciones asistentes.
“Este no es un evento del gobierno, esto pertenece al pueblo panameño que solo podía ver a este tipo de atletas por televisión y ahora están aquí en persona, ganado medallas”, enfatizo el Mandatario panameño, quien estuvo acompañado por su homólogo Hondureño Porfirio Lobo.
Martinelli, quien estuvo acompañado de la primera dama Marta Linares de Martinelli, agradeció a los atletas de los diferentes países participantes por aceptar la invitación panameña de reunirse en una competencia que resalta los valores deportivos de cada una de las naciones, pues Centroamérica vive un excelente momento de unión, no solamente política sino deportiva.
Reiteró la iniciativa de lograr la sede de los Juegos Bolivarianos para el año 2013. “Ese anhelo de tenerlo no está muy lejos y conversamos con el Presidente de Colombia y el Presidente del Comité Deportivo de esa nación y existe el compromiso de apoyarnos para que esos juegos se realicen aquí”, afirmó.
“Estoy seguro que Panamá sabrá darle a todos los atletas y hermanos centroamericanos y del Caribe que nos visitan la recepción que merecen y el calor humano que los panameños sabemos dar”, concluyó Martinelli.
Previo a este mensaje, desde tempranas horas miles de personas formaron filas en las afueras del Rommel a la espera de su ingreso y formar parte de la historia. Con estos cotejos deportivos, Panamá abre las puertas de las nacionalidades al acoger el desarrollo de 19 disciplinas deportivas cuyo oro se los disputan El Salvador, Honduras, Nicaragua, Belice, Costa Rica y Panamá.
El espectáculo central inició cuando las luces del Rommel se apagaron y los asistentes comenzaron a aplaudir y a gritar, al instante aparece en escenario Margarita Henríquez haciendo la apertura con el jingle “Vamos a ganar”, mientras a los costados y frente a la tarima desfilaban los escoltas de la escuela de marinos.
Luego una a una fueron ingresando a la pista las delegaciones de atletas, quienes se llevaron el gran recibimiento del pueblo panameño con aplausos y vítores, sin duda el patriotismo a su máxima expresión se vivió cuando se anunció la entrada de la delegación canalera que era encabezada por el medallista de oro Irving Saladino, acompañado por más de 300 atletas que buscan dejar a Panamá en alto.
Luego el momento cumbre de todo juego deportivo: el encendido de la llama que perdurará hasta el final de los cotejos. Con antorcha levantada en señal de victoria, el primero en ingresar fue el nadador Cesar Barría quien la llevó hasta encontrarse con el beisbolista Ramiro Mendoza, este a su vez entregó a Davis Peralta, luego el turno fue de la sirenita Eileen Coparropa quien entregó finalmente la llama al campeón de boxeo Roberto “Mano de Piedra” Durán, el encargado de finalmente encender estos juegos.
Juego de luces, fuegos artificiales, acrobacias y, además de Margarita, el paso de otros artistas como Nigga, Samy y Sandra Sandoval, Comando Tiburón, Dj Black y Principal engalanaron esta fiesta que llenó toda la expectativa de los asistentes.
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