Por. Evergisto Urriola
Aproximadamente hace 2 años de haber iniciado el programa OPERACIÓN MILAGROS, con sede en la clínica oftalmológica Omar Torrijos Herrera, creada para este fin en las instalaciones del hospital Chicho Fábrega de Santiago de Veraguas, la misión médica de las batas blancas de la avanzada medicina oftalmológica cubana se retira , por la decisión del gobierno del Sr. Martinelli, de cancelar dicho programa, a recomendación de una de sus familiares vinculada al negocio de la oftalmología en Panamá y en obediencia a los dictados de las políticas aislacionista que ejecuta durante más de 50 años los EEUU contra la heroica revolución cubana.
El servicio médico cubano ofrecido en el programa operación milagros, le ha dado la oportunidad de ver a más de 55 mil panameños (as), sin pagar un centavo por dicho servicio altamente especializado y con tecnologías de punta en el ámbito de la oftalmología, envidiable en los propios países desarrollado. Es digno recordar cuando una abuela Panameña luego de ser operada, logro recupera su vista perdida desde hace muchos años y vio por primera vez a su nieta , la emoción profunda que expreso , ya que nunca había logrado ver a su querida nieta, y más cuando los médicos a los que había acudido le habían dicho que ese problema de ella no se podía resolver, y que si se operaba, eso le costaba mucho dinero.
¿Cuanto dinero se ha ahorrado el estado panameño? con esa incuestionable solidaridad expresa y concreta que Cuba le ha ofrecido sin ningún interés, a pesar de ser un país, pobre cercado económicamente, y que ha sufrido los impactos de muchos huracanes. Quien puede cuestionar los valores humanos que siempre expresaron los médicos cubanos en la atención a los pacientes que acudieron en busca de ayuda oftalmológica. Los médicos Cubanos entrevan a su trabajo a las 7:00 a.m. y eran las 7:00p.m y aún estaban atendiendo a sus pacientes, haciendo honor al juramento al graduarse, servir a la humanidad no importa a quien, donde, cuando y a que precio, jamás hicieron diferencia o distinción en sus pacientes por ser ricos, capas medias o pobres, comunistas, o anticomunistas, revolucionarios o reaccionarios, PRD o CD, con partido o sin partido, a todos los atendieron con igualdad, ese es un ejemplo de una medicina al servicio de la humanidad, y no solo aquí, sino en todas partes del planeta, donde existe misión médica cubana, vale destacar, que al propio asesino del comandante Ernesto Che Guevara en Bolivia, la misión medica cubana en ese país, hace un par de años, le dio la oportunidad de ver. Los médicos cubanos han dado el ejemplo más grande en solidaridad que pueblo alguno haya dado finales del siglo xx e inicio del siglo xxi.
Mientras las naciones desarrolladas lanzan bombas, bacterias, balas y provocan sismos que acaban con la vida de millones de personas, la revolución cubana bajo su dirección y su pueblo, envían a los pueblos servicios médicos, alfabetizadores, instructores deportivos, tecnología agropecuaria, becas para estudiar medicinas y otras ramas del saber, para el desarrollo de nuestros pueblos.
Ahora resulta que el presidente de Panamá, Sr. Martinelli que dijo “AHORA LE TOCA AL PUEBLO”, ha cancelado un programa que beneficiaba indiscutiblemente al pueblo, simplemente para darle oportunidad a la medicina oftalmológica comercial, al servicio de las cajas registradoras, del clan de médicos, que solo le interesa hacer dinero sin importar la parte humana del paciente. Quien puede negar en Panamá, que una cirugía de un solo ojo, tiene un costo aproximado para el paciente de B/ 1,500.00 mil quinientos balboas, y lo más cuestionables, cada vez que un paciente busca servicio médico privado, lo primero que recomiendan es que tiene que usar lentes, y ellos mismos los venden en combinación con las ópticas, a precios de usura. Es cierto que la carrera de medicina y la especialidad en los países capitalista incluyendo el nuestro es sumamente costoso, pero la medicina, la educación, no pueden solo estar al servicio del mercantilismo, tienen que tener un profundo sentido humano, por eso los pobres y las capas medias, en nuestro país se mueren por falta de servicios médicos,¿A donde llegará una sociedad que olvida los más sagrados valores del ser humano, como lo es la vida saludable?
Cancelar el programa “ Operación milagros” es un desprecio abierto a los sectores más pobres de Panamá y una clara evidencia de supeditación entreguista del gobierno panameño, a la política errática del gobierno de los EEUU, de continuar con el aislamiento a Cuba.
Quiero cerrar esta reflexión señalando lo siguiente; a pesar de no haber sino operado por los médicos de la operación milagros, expreso en nombre de los miles de panameños (as), que si recibieron la oportunidad de ver y mejorar su visión, y que no tienen la oportunidad de escribir, nuestro eterno agradecimiento, a los médicos cubanos(as), al pueblo de cuba, su presiente general Raúl Castro, al líder indiscutible de la solidaridad mundial Dr. Fidel Castro, por esa oportunidad de salud que le dio a los compatriotas nuestros y a los miles de estudiantes que hoy se forman de médicos sin costo alguno en las universidades cubanas, ejemplo que ningún gobierno de los países ricos podrán igualar, mientras piensen en tener, olvidado el ser.
Santiago, de Veraguas, Panamá ,2 de Febrero 2010