Por: Arq./Ing. Martin Isaac Donderis
Nuevamente nos abocamos a elecciones presidenciales. Como es lógico, de aquí a Mayo se hablará y escribirá sobre las propuestas y habrá un “declive económico” por eso del “a ver que pasa” el cual, unido a las circunstancias mundiales, pondrá mas presión económica sobre la nación.
En forma general, se percibe por los electores que:
- Los candidatos prometen lo que sea, obviando la situación que vivimos, para conseguir votos.
- Las propuestas son ilusorias y generales; sin establecer como se realizarán.
- Predominará en el ganador el amiguismo y los “compromisos políticos”. No se seleccionará basado en la capacidad sino en base a partidismo y “personas de confianza”.
- Sigue el mismo cuento y es mejor “acomodarse lo mejor que se pueda.., apoyando a uno pero guardando buenas relaciones con los contrarios”.
La nación panameña ha cambiado, está más ilustrada y preocupada por su futuro, sobre todo, la juventud, y ésta:
- Ya no se come el cuento que siempre, para estos tiempos, venden los políticos.
- Quiere ver resultados, no promesas que quedan en nada.
- Quiere tener un futuro más claro y esperanzador; no cantos de sirenas.
- Quiere ser y sentirse dueña de su destino, no como antes, escuchando los mismos discursos y arengas de siempre.
- Quiere ver el progreso como nación, mejorando, aún más, la situación que ha vivido hasta ahora.
Es necesario que se emitan propuestas serias, realistas y factibles, acordes a nuestra realidad y capacidad como nación, y divulgadas en forma seria y formal a nivel nacional. Se percibe que las mismas, para ser tomadas en serio por los electores, deben ser:
- Creíbles, realizadas por personas que conozcan nuestra realidad sin buscar soluciones esotéricas y traídas por los cabellos.
- Coherentes, con nuestra realidad y con la capacidad real de la nación.
- Realistas, nada de planteamientos ni promesas vanas, absurdas y falsas, sino basadas en posiciones serias y razonables.
- Ejecutables, generando resultados a corto y mediano plazo, sentando las bases a largo plazo.
- Facilitadoras, fomentando el mejoramiento intelectual y la calidad de vida de la juventud y la nación en general.
- Esperanzadoras, generando la confianza de que existe igualdad de oportunidad para todos, en base a sus capacidades y méritos.
- Respetuosas, de los derechos y deberes de los integrantes de la nación, generando la confianza en el sistema de gobierno democrático que vivimos.
Se percibe la imperante necesidad de resultados para la nación, tomando el rumbo del progreso y del mejoramiento de la calidad de vida, de consulta permanente y una responsable participación ciudadana en la toma de decisiones gubernamentales.
Tenemos una miríada de personas preparadas y este talento se involucrará a mejorar el país si percibe que se plantea un gobierno serio, responsable y honorable.
Vivimos tiempos interesantes e inmersos en temas de Globalización, TLC’s, etc.., por lo que es necesario que el(la) futuro(a) presidente(a) de la nación tenga su cabeza muy bien puesta sobre sus hombros para dirigir a la nación en forma firme, serena y cordial, por las vias del Progreso, del mejoramiento intelectual y de la calidad de vida, y de la participación ciudadana en el diario quehacer nacional.
Al fin y al cabo ustedes, Sres. Candidatos, decidirán que propuestas presentarán; de quiénes se van a rodear en su gobierno y así mismo pasarán a la Historia… De ustedes depende…
El autor es:
- Expresidente de la Federación de Asociaciones Profesionales de Panamá – FEDAP.
- Expresidente de la Sociedad Panameña de Ingenieros y Arquitectos – SPIA.