Con motivo de los acontecimientos del día de ayer relacionados con la Procuraduría General de la República, el PARTIDO REVOLUCIONARIO DEMOCRÁTICO advierte y señala que este nuevo atropello se suma a todos los que han sufrido las instituciones y el pueblo panameño en el último año, por las decisiones antidemocráticas del gobierno de turno.
Esta farsa montada por Presidente Ricardo Martinelli, en el que se han violentado por parte de cinco magistrados de la Corte Suprema de Justicia, todas las garantías establecidas en la Constitución y las leyes, ha estremecido los cimientos de la conciencia nacional y demuestra lo que nuestro Partido ha venido señalando con insistencia: que vivimos en una atmósfera de intolerancia, de persecución, de soluciones de fuerza y de enfrentamiento, todo lo cual ha sido constantemente sentido por los trabajadores, los grupos indígenas, los agricultores, los profesionales, los empresarios y por todo aquel que discrepe con los actuales gobernantes, con su estilo o con sus políticas .
Nada se ha salvado. Los órganos del Estado, que debían ser independientes, están absolutamente sometidos a los caprichos del gobernante de turno y las leyes son un ejercicio inconsulto de sorpresa en sorpresa y de camarón en camarón.
Mientras el ejecutivo persigue y atenta contra la democracia el gasto público selectivo está totalmente descontrolado. Mientras tanto, se acumulan las necesidades de la población y la democracia va de tumbo en tumbo, al compás de la voluntad colérica de una persona y sus colaboradores, todos en competencia frenética para ver quién se parece más a Martinelli.
Sabemos que luego de la ley 14 que convirtió en delito protestar en las calles y del atropello criminal contra los trabajadores y el pueblo de Bocas del Toro, se abriría otra etapa del terrorismo judicial, contra los adversarios políticos, principalmente del PRD, los líderes de la sociedad civil, los medios de comunicación social y todos aquellos que no se sometan a las arbitrariedades y absolutismo de quien gobierna bajo la premisa de que “el Estado soy yo”.
La situación creada en la Procuraduría es el resultado inevitable de la agonía de la democracia, pero al Partido Revolucionario Democrático le sobra firmeza y voluntad para continuar luchando contra la dictadura civil que le ha caído a nuestro país. Es la hora del diálogo entre los que sentimos preocupación por el destino de la República y creemos que, en los últimos veinte años, no se había vivido en Panamá nada semejante. La lucha está planteada.
Dado en la ciudad de Panamá, a los doce días del mes de agosto de 2010.
COMITÉ EJECUTIVO NACIONAL
PARTIDO REVOLUCIONARIO DEMOCRÁTICO