Por: Michelle Virginia Simpson Aleman
Un nuevo giro tomarían las investigaciones que adelanta el Ministerio Público de la República de Panamá, con respecto a la supuesta participación del expresidente Martín Torrijos en presuntos actos de corrupción durante su gestión de Gobierno. (http://mensual.prensa.com/mensual/contenido/2010/08/23/uhora/local_2010082311180082.asp).
Torrijos, quien en la actualidad aduce ser un “perseguido político” de la administración Martinelli (http://www.elsiglo.com/mensual/ediciones.asp), sería ahora querellado por la la periodista digital panameña, Michelle Virginia Simpson Alemán, por el aparente encubrimiento y obstrucción de la justicia durante una investigación penal que involucraba al entonces jefe de la escolta presidencial, Juan De León, en el presunto delito de tráfico internacional de drogas.
El exdirigente por el Partido Revolucionario Democrático (PRD), fundado en 1979 por figuras allegadas a su padre, el desaparecido jefe de la milicia panameña, Omar Torrjos Herrera, muerto en un accidente aéreo en 1981, habría ordenado, sin la autorización previa de la Corte Suprema de Justicia de Panamá, el seguimiento, vigilancia y rastreo de las comunicaciones privadas de dos periodistas (entre ellos, Simpson Alemán) y de un excolaborador del Consejo de Seguridad Nacional, tras haber sido publicada una noticia en la que se revelaba que De León era uno de los investigados dentro del expediente en cuestión.
En un anuncio formulado mediante “boletín de prensa”, Simpson Alemán da cuenta de su intención de interponer una denuncia contra el exmandatario ante la dependencia judicial correspondiente, la tarde de este martes 7 de diciembre.
La periodista panameña, quien reporta para medios digitales internacionales, asegura en su comunicación abierta dirigida a medios locales e internacionales, que pondrá en conocimiento de las autoridades de “(…) todo cuanto sabe (…)” acerca de las acciones de Torrijos contra la libertad de expresión y la independencia judicial, las cuales – advierte – “(…) habrían facilitado el desarrollo impune de la actividad criminal en el país (…)”.
La más reciente acusación contra el hijo del fallecido líder del ejército panameño, se produce en momentos en los que el actual gobernante, Ricardo Martinelli, habla de la necesidad de “depurar” a la clase política panameña, ‘contaminada’ por los flagelos del crimen organizado y el tráfico internacional de drogas.
En agosto pasado, el pleno de la Corte Suprema de Justicia de Panamá, ordenó la indagatoria a Torrijos por su presunta vinculación al trámite de sobornos para que miembros de la Asamblea Nacional de Diputados votasen a favor de un proyecto para la creación de un centro multimodal en la atlántica provincia de Colón, la tercera en importancia en el país.