El vicepresidente de la República y Presidente del Partido Panameñista, Juan Carlos Varela, participó en la marcha del lunes pasado, como parte de las acciones de protestas que se ejecutaron en la capital en contra de la reactivación de la Sala V de la Corte Suprema de Justicia, la venta de las acciones estatales de las empresas eléctricas, así como las de Cable & Wirelees.
Lo que nunca imaginó el Vicepresidente de la República, fue que un activista de la sociedad civil marchó a su lado con un cartelón cuyo mensaje decía: “Este también vendió el país” y una flecha que lo señalaba, haciendo alusión a la participación de Varela en los proyectos que impulsó el gobierno de Ricardo Martinelli durante los primeros 26 meses de su mandato.
Entre las iniciativas que ejecutó la mancuerna política Martinelli-Varela figura la ley que devolvió la nacionalidad al exalcade panameñista Bosco Vallarino, eliminación de la Carrera Administrativa y la “Ley Chorizo” o “Ley Carcelazo” que ocasionó muertos y heridos en Changuinola, Bocas del Toro.
Además se le atribuye participación en el aumento del ITBMS de 5% a 7%, cuyo propulsor fue el entonces ministro de Economía y Finanzas, Alberto Vallarino; la eliminación de la ley de revocatoria de mandato para los tránsfugas, la implementación de las impresoras fiscales, la destitución de la procuradora de la Nación, Ana Matilde Gómez; la exclusión de Panamá del PARLACEN y la compra del avión presidencial, entre otros.
Recientemente, el presidente del Partido Popular, Milton Henríquez; y el secretario general del Partido Revolucionario Democrático (PRD), Mitchell Doens, accedieron a formar parte de la coalición del Frente por la Democracia, que se anunció en la sede del Partido Panameñista.
Se pudo conocer que la decisión de Doens ocasionó a lo interno del PRD un descontento ya que el Estatuto en el Capítulo VI, Artículo 30, acápite i, señala que “decidir, previa consulta con el Consejo Directivo Nacional, sobre la participación del Partido en colaciones y otras formas de asociación política que no persigan fines electorales”.