26 de junio de 2008
Resulta inconcebible que en un país que se precia de proteger la libertad de información, un funcionario del Órgano Judicial se haya atrevido a emitir una orden tan descabellada y absurda como la de prohibir a medios de comunicación informar objetivamente sobre la identificación de personas involucradas en un litigio civil, que además es del dominio público. Como el resto de los ciudadanos serios de este país, Vanguardia Moral de la Patria exige que el propio Órgano Judicial reafirme su independencia, rechace el intento de censura y corrija tamaña afrenta que, en términos vernaculares, no ha sido más que una ramplona metida de pata.
La disposición legal macarrónica que le ha servido de base al juez para aplicar una medida tan inusual indica que ella cabe, en circunstancias excepcionales dentro de un litigio, cuando se hace necesario proteger al litigante de “un peligro inmediato e irreparable” antes de la sentencia final. Ese peligro no amenaza al litigante en este caso específico porque ni como abogado ni como empresario ni como asesor presidencial la noticia de su participación en un pleito civil puede constituir un peligro ni inmediato ni irreparable para él.
Por tanto, cabe sospechar que la extraña medida del juez tiene su razón de ser exclusivamente en la función de jefe de una campaña política que desempeña el individuo a quien intenta proteger y que dicha campaña política —no el propio litigante— será la afectada por el “peligro inmediato e irreparable” causado por la información censurada.
Lamentablemente, cuando se estira y se tuerce la ley para imponer una represión como la aludida, se envían señales de genuflexión indecorosa que atizan aún más el desprestigio del Órgano Judicial.
Guillermo Endara G.
Presidente de Panamá (1989-1994)
Candidato a Presidente de Panamá (2009-2014)
Presidente y representante legal del partido
Vanguardia Moral de la Patria