Cualquier forma de violencia en medio de una campaña electoral no se justifica y es además delito electoral, además de un delito penal de lesiones y otros delitos. No se debe hacer violencia contra un candidato a cualquier cargo de elección, menos en contra de los candidatos presidenciales, debemos evitar esas practicas del pasado, para evitar repetir errores de confrontaciones políticas de nuestra historia patria. Todos los partidos y candidatos presidenciales deben ratificar el Pacto Ético Electoral, respetar el Código Electoral, los estatutos de los partidos, todas las leyes nacionales y la constitución nacional, así como respetar a la libre expresión democrática del pueblo en las urnas.
Ricardo Martinelli hizo bien en condenar el hecho, pues también pudo pasarle a él, se debe siempre defender las bases del actual sistema democrático pacifico, que tanto costo a Panamá lograr. Eso le pudo ocurrir también a Ricardo Martinelli, aun peor, pues como hombre no se iba a dejar que le golpearan, haría como Billy Ford en 1989 enfrentando. Todo eso esta mal, se deben calmar los ánimos, mas en tiempo electoral, aun cuando se haga campaña en medio del carnaval, entre tanto ‘locos(as)’ y ‘cholo(as)’ borrachos(as); aclaro que me refiero a los motes de las fuerzas políticas en contienda electoral. Lo ideal será que no se vuelvan a cometer esos errores del pasado, de confrontación entre panameños. Sin embargo a veces los pueblos repiten la historia en espiral. Se debe consolidar el sistema democrático, que no es perfecto, pero es el único que permite que diferentes ideas y fuerzas políticas compitan en elecciones pacificas por el voto popular.
Pero ante todo Balbina Herrera es una dama, no se debe perder la hombría y la caballerosidad, en política la competencia debe ser siempre con hidalguía y en paz, pues la violencia solo engendra mas violencia; aquel que siempre tormentas, cosecha tempestades. Pero algunos seres humanos solo somos como decía de si mismo Simón de la Santísima Trinidad Bolívar y Palacios, Libertador de América “Solo una débil hoja en medio de un huracán revolucionario”, y al decir de Rubén Blades “Cada hombre lleva encima la huella de su tiempo”.